¡Que dolor de muelas¡ No puedo estudiar, ni leer, ni jugar, y ni siguiera puedo dormir", se quejaba desconsoladamente. Alguna vez habras tenido dolor fuerte de algo, ¡que pesadilla¡
Pues bien, el dolor de los pecados NO es asi. Para perdonarnos en la confesion Dios nos pide dolor, y este dolor consiste en tres cosas:
1. reconocer que se ha pecado voluntariamente
2. desear no haberlo hecho
3. querer no volver a hacerlo y, para ello, poner los medios oportunos.
Es bueno que fomentes y busques el dolor de los pecados. Cristo, como hombre que era, padecio todos lo sufrimientos de su pasion hace muchos siglos. Pero como Dios es eterno, no tiene tiempo: no hay para El un antes y un despues. Todo esta presente ahora delante de El. Es igual el 580, el el 2010 o el 3120.
Y en el año 30, cuando cargo con la cruz, y le atravesaron sus manos y pies con clavos, etc,. tenia presente en su cabeza divina todo lo que yo y cualquier otro hombre hacemos ahora y en cualquier otro momento de la historia. Por eso en el año 30 PENSABA EN TI,Y TU ESTABAS PRESENTE EN LA PASION.
Dame, Señor, dolor de mis pecados. Dolor de amor. Lo que yo hago te afecta. Tu pensabas en mi en tu pasion. Y cada dia, en cada misa, renuevas tu pasion. Y la renuevas pensando en mi. Gracias y aumentame el dolor de mis pecados.
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miércoles, 24 de marzo de 2010
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